Almacenar y acceder a gran cantidad de datos para su posterior análisis y uso ha existido siempre, pero a principios de la década de los 2000 cobró impulso el BIG DATA con Doug Laney con las tres V: Volumen, Velocidad y Variedad.

Hoy en día, la aplicación del Business Intelligence ha evolucionado mucho; recopilar datos es tan útil como sencillo y se puede realizar a través de redes sociales como Facebook, Twitter o también desde AdWords o incluso a través de la página web.

Quizá la parte más compleja es clasificar, organizar e interpretar toda esta información para adaptar nuestro negocio a los resultados. Esto es posible a través de diferentes herramientas de análisis.

Gracias a este análisis podremos entender el comportamiento de nuestros clientes o clientes potenciales gracias a analizar su actividad y acotar el público objetivo definiendo así nuestro “customer persona”. Nos permitirá saber, por ejemplo, qué productos o servicios son los más visitados y los que menos, cuáles generan más interés, qué debemos ofrecerles y cómo, etc.

La optimización de stock también es algo que podremos llevar a cabo gracias a haber realizado un seguimiento de la conducta de los usuarios. Sus selecciones nos permitirán saber cuánto stock debemos tener disponible según la demanda que tengan los artículos.

Actualmente, es muy importante adaptar la web al comportamiento individualizado de cada usuario o grupo de usuarios para optimizar las ventas de cualquier negocio. Las recomendaciones de productos adaptados deben ir más allá de las categorías básicas utilizadas hasta ahora. Pedir el correo electrónico, recordar los productos abandonados en la cesta virtual u ofrecer descuentos, son algunas de las técnicas usadas para segmentar los usuarios en función de su comportamiento.

En resumen, actualmente, el Business Intelligence es de gran utilidad y sirve para cualquier negocio que quiera crecer. Su uso es fundamental para conocer y analizar la experiencia de compra de sus clientes y potenciales clientes. Aplicar estos conocimientos a la estrategia publicitaria permitirá aumentar las tasas de conversión, afianzar los clientes, aumentar las ventas, generar ventas cruzadas y mejorar la gestión del inventario a través de una optimización del stock.

Si no estás usando Business Intelligence en tu negocio, ¿a qué estás esperando?